Dejame

Déjame olvidar entre tus brazos el sabor amargo de la soledad, olvidar el veneno de la lejanía, olvidar el frió de mis propios brazos y callar la boca del silencio.
Quiero reírme de la soledad, quiero estar cerca de ti, quiero la calidez de nuestros brazos, que no sea necesario decir algo para comunicarnos, que nuestros ojos digan mas que nuestras bocas, que nuestro gestos sean mas elocuentes que lo que escribo.

Pero también debo dejar de lado el miedo, debo dejar de lado las expectativas y con el alma en cero encontrarte, para no decepcionarnos, para amarnos como si nada hubiese pasado antes, para que las heridas del pasado se mantengan cerradas. Por eso ahora estoy cambiando, me estoy transformando, me estoy depurando, me estoy transformando en un hombre nuevo, uno que lo único que anhela es amarte.

Tengo Frio

Cuando despierto a veces tengo frió; no ese frió físico de siempre, tengo un frió distinto, ese que me hace desear despertar abrigado entre tus brazos. Cuando la luz se va, ese frió se va también, porque puedo sentir tu calidez, tu cuerpo, tu esencia, tu todo junto a mi, protegiéndonos, amándonos, contemplándonos, en nuestro momento único y personal. En ese momento, aunque no te veo, siento que estas ahí, junto a mi, total y esplendorosa. Pero cuando la luz vuelve, también vuelve el frió, también vuelve tu ausencia.

¡Se Acabo!

Definitivamente me aburrí de buscarte, aunque no te estaba buscando, me aburrí. Quiero encontrarte. En realidad es absurdo decir que no te estaba buscando si quiero encontrarte, en fin, quiero encontrarte, pero me cuesta.

Es que te necesito, necesito que alguien se atreva a romper el hielo que aparento, que alguien ciña sus brazos en mí, necesito mas afecto del que ya tengo, y no es por que quiera algo solo para mí, sino por que también tengo mucho afecto que dar. No se si estas en algún lugar, pero necesito de ti.

Siempre he creído que he sido capaz de dar todo ese afecto en mi familia y amigos, y en efecto es así, pero últimamente es claro que me he enfriado, quizás es la falta de contacto físico, y no me refiero a solo esa mujer que busco. A ratos siento que necesito a alguien que me sostenga cuando quiero caer, que me contenga cuando quiero explotar, que me acompañe cuando todo va bien. Y como no estas tu, tiendo a suplir tu falta en mi, quizás por eso me quiero tanto, porque cuando estoy solo y pienso en todo, simplemente caigo, exploto y disfruto los buenos momentos solo. Es por eso que hoy he decidido dejar a mi novia de 19 años, he decidido, dejarte con odio, ¡se acabo! Adiós soledad. Hoy he decidido abrirme a las personas, a conocer el mundo sin adaptarlo a mi, a permitirme el contacto, a liberar mi real esencia, pero que puedo hacer contra el aspecto frió y tosco de mi parecer físico.

Eso es lo que necesito, que las personas que me rodean me ayuden a romper mi hielo y ser un ser mas abierto al afecto demostrado de forma evidente, necesito que se acerquen a mi, que sean mas que siluetas a lo lejos, que sean una necesidad para mi.

Pero también se que no todo es malo en mi, en este aspecto, se que me preocupo de las personas que me importan, y que mas allá de lo que las circunstancias hagan, las personas me importan, por eso, les digo ayúdenme a romper el hielo de mi aspecto y de mi esencia, a aceptar el contacto (no me refiero a ella, sino a todos ustedes), a ser mas evidente en mis afectos, a canalizarlos de forma que puedan saber que realmente me importan. Y quizás de esa forma logre encontrar a la persona que busco, después de superar todas mis limitantes.

Manifiesto de quien soy

Declaro hoy, estimados amigos, que nunca he estado completo, que falta ella, que llene los espacios de mi existencia, que mate mi ego y mi soberbia, que tome mi amor propio y lo vuelque en ella, que encuentre la forma de descongelar este ser frió ser y convertirlo en alguien amable. Declaro que faltas tú, que hagas aburrido mirar mis propios ojos en las ventanas del metro y que encuentre el complemento que busco en tus ojos. Que hagas que todo lo que hoy hago solo, sea más entretenido contigo.

No te he buscado ni lo haré, pero se que estas ahí, en algún lado, que algún día nuestros ojos se cruzaran y el tiempo se detendrá, quizás ya nos hemos visto, quizás nos conocemos, pero las circunstancias hacen que nada haga notar que lo nuestro existe, pero en algún momento, cuando todo sea claro, nuestros ojos verán bien lo que nuestras esencias quieren decirnos.

En realidad para mi es pura mierda lo que he dicho, es retórica y cursilería, pero al liberar lo que siento, se que no miento, que te veré algún día y quizás nada cambie, pero me gusta pensar que podría ser así.

Los que me conocen saben que yo no soy así, pero puedo decirles que ese, a quien conocieron en el pasado, sigue aquí, ese egocéntrico, soberbio, antisocial, orgulloso, políticamente incorrecto, que no teme a decir lo que piensa y siente. Y por eso mismo, les cuento, que luego de haber comenzado un proceso nuevo en mi vida, hay cosas que han cambiado, soy básicamente el mismo, pero he dejado que las cosas fluyan, que el ritmo me lleve y me haga nuevo, que modifique quien fui y haga que depure todo lo que era necesario mejorar. Aunque han pasado diez días, cosas si han cambiado. He dejado algo de mi soberbia, para permitirme reconocer que puedo aprender de mis pares, que no basto para mí, que necesito de otros, pero hay cosas que no dejare jamás, como mi amor propio, como el hecho de decir lo que pienso aunque sea políticamente incorrecto, que jamás botare a alguien para lograr lo que quiero.

A mis viejos amigos, les digo que doce años de amistad no se botan a la basura por la distancia ni el tiempo, que cada día que pasa, pienso en ustedes y que desde lo más profundo de mi esencia, les deseo éxito. Porque sabemos que somos capaces de lograr lo que queremos. Y que cuando nos veamos en unos años, nos miraremos con la satisfacción de haber hecho una amistad que sobreviva a todo.

Ahora quizás nos miramos y decimos que somos compañeros, pero yo ya no estoy de acuerdo, donde estamos no somos solo compañeros. Claro, después de diez días no somos amigos de toda la vida, pero hace 13 años comencé un proceso similar y termino en grandes amistades. Todos sabemos donde va esto que estamos formando, somos amigos, protoamigos, pero lo somos, y sin duda hay un afecto que la rutina y el ambiente han sabido alimentar. Para la mayoría de nosotros serán al menos seis años en los que nos veremos a diario, y no estoy dispuesto a alejar una relación tan rica, por la frialdad profesional y competitiva, así que amigos, para lo que necesiten estoy ahí, pueden contar conmigo tanto académica como personalmente.

Tal como comencé, definitivamente no estoy completo, pero espero estar cerca de completarme, todo ha comenzado otra vez, un proceso nuevo, una vida nueva, pero yo soy el mismo, algo mejorado, pero el mismo. Definitivamente necesito tu rostro, tus ojos, tu afecto, simplemente Tu.